Viendo la primera parte del documental, me dan ganas de vomitar, y viendo la segunda, a esos chicos con la bandera, la hoz y el martillo, me dan ganas de sonreír. Mucha manifestación y la creación de puestos de trabajo ¿ qué ?, abogo por una república, pero no de esta manera. Lástima que en este país los que luchan por una república siempre son de partidos de izquierda, y los demás partidos ¿qué?