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Mientras Rajoy aseguraba en Génova que el alcalde de Boadilla, "el albondiguilla", había dimitido, el regidor negaba tal extremo: "No he puesto ningún cargo a disposición, ya hablaré con el PP". "No me voy a convertir en cabeza de turco de nadie". La dirección del partido advierte que si no se va, será expulsado.

 

El alcalde de Boadilla, Arturo González Panero, ha negado que haya puesto su cargo a disposición del PP y que tenga intención de dimitir a raíz de la operación iniciada por el juez Garzón contra la trama de corrupción que actuaba en municipios del noroeste de la Comunidad de Madrid y en la Comunidad de Valencia.

González Panero ha asegurado ante los medios de comunicación que tiene "la conciencia tranquila" y que las adjudicaciones realizadas por su consistorio fueron "impecables" y "aprobadas por la oposición".

"No he puesto ningún cargo a disposición, yo hablaré con el Partido Popular y les contaré lo que he venido a hacer hoy aquí, en cuanto tenga oportunidad", ha dicho el edil de Boadilla, quien ha negado haber dimitido.

Asimismo, preguntado acerca de la posibilidad de que el testimonio de Francisco Correa --uno de los principales detenidos en la trama-- provoque su ingreso en prisión, ha contestado: "No, le puedo asegurar que no".

Comparece ante Garzón voluntariamente

El alcalde se ha presentado de manera voluntaria ante el juez Garzón para pedirle que le llame a declarar como testigo "cuanto antes". Así, el primer edil ha hecho entrega al juez de un documento en el que le solicitaba comparecer aunque el magistrado --quien le recibió durante unos minutos en su Juzgado-- le ha comunicado que la causa está secreta y que por el momento no tiene intención de interrogarle.

Garzón le ha trasladado su pesar porque esta situación le haya generado algún trastorno. En ese sentido, preguntado acerca de la presuntas implicaciones de su consistorio en la trama, ha indicado ante los medios que tiene la "conciencia tranquila" y alegó que todas las concesiones realizadas por el Ayuntamiento, fueron "impecables" y que fueron "aprobadas por la oposición".

El alcalde ha asegurado que no se encuentra imputado en la investigación y ha aclarado que su ayuntamiento ha tenido relación puntual con tres de las empresas de Correa. Así ha indicado que el consistorio facturó a Pasarena Viajes contratos por un importe de 5. 500 euros en un plazo total de cinco años, contrató servicios con ServiMadrid por valor de 2. 000 euros y adjudicó a la empresa EasyConcept la oficina de atención al ciudadano con el voto favorable de la oposición.

    "La documentación aportada por el ayuntamientos sobre estas adjudicaciones es totalmente transparente".

Además, González Panero ha aclarado que rompió su relación con Correa en 2004. "Desde ese año no tengo ningún trato", ha indicado en declaraciones a los periodistas a su llegada a la Audiencia Nacional.

El alcalde ha añadido que conoció al empresario debido a las buenas relaciones que mantenía "con gente del partido" y ha dicho que su intención es ayudar a lo que se pueda y conseguir de esta forma que "todo quede claro".

    "No quiero seguir estando en portadas de periódicos en las que se dicen burradas sin relación alguna con la realidad".

Correa: "Si entrego la cinta que tengo del albondiguilla se caga, pero voy también al trullo"

 

"Si entrego la cinta que tengo del albondiguilla se caga, pero voy también al trullo, y además me interesa seguir haciendo negocios cuatro años en Boadilla". El "albondiguilla" es Arturo González Panero, alcalde de Boadilla del Monte y quien se refiere a él de forma tan despectiva es Francisco Correa, el pinturero jefe de la trama que se dedicaba a dar pelotazos urbanísticos a la sombra del PP.

La frase -tremenda y reveladora- aparece en una de las cintas grabadas por la policía, por encargo de la Fiscalia Anticorrupción y filtradas ahora al diario El País, como se hace desde el Gobierno ZP con casi todo lo que afecta negativamente a los populares.

Correa no tiene ni ha tenido cargos en el PP. Ni siquiera se lleva bien con Mariano Rajoy, quien cortó toda relación con el "pinturero" y su clan, apenas llegar a la presidencia del partido en 2004.

Eso no impidió, sin embargo, que Correa y los suyos siguieran haciendo tropelías y grandes negocios, alardeando siempre de ser muy poderosos y de estar al tanto de operaciones turbias, que podrían "utilizar".

A propósito de un concejal del norte de Madrid, en las grabaciones se escucha decir a Correa:

    "Le pusimos ahí y está subidito, se le ha olvidado que ha estado en la mierda".