El Confidencial
Decía Pedro Solbes hace poco más de medio año -mayo de 2008- que no se debía "impedir artificialmente el necesario ajuste de la construcción". Y si lo que pretendía el vicepresidente segundo con esa estrategia era favorecer un ajuste rápido e intenso en el sector, con la vista puesta en una rápida recuperación, no hay ninguna duda de que el tiempo ha bendecido esas palabras, al menos en su primera parte. El 'ladrillo' cae a plomo sin intervención relevante por parte del Estado.