Los precios volvieron a subir en febrero, en especial los de los alimentos. La tasa de variación interanual del IPC ha subido ligeramente hasta el 6%, según ha informado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE). Al mismo tiempo, la inflación subyacente ha marcado un nuevo máximo, tras ascender una décima hasta el 7,6%. La mayor presión sigue estando sobre los alimentos, cuyo IPC ha registrado un nuevo récord histórico al llegar al 16,6%, pese a la rebaja del IVA.
El INE ha revisado una décima a la baja su estimación preliminar avanzada a finales de febrero. Aun así, tanto el IPC general como el subyacente -aquel que excluye la energía y los alimentos no elaborados, por su alta volatilidad- han crecido una décima en términos interanuales, con respecto a los datos de enero. La inflación subyacente ha pasado de una tasa del 7,5% en enero al 7,6% en febrero, el dato más elevado desde diciembre de 1986. Este índice acumula cuatro meses al alza y mantiene la distancia de 1,6 puntos por encima de la tasa general.
El alza interanual ha sido idéntico en el IPC general. Según los datos publicados este martes, los precios en febrero fueron un 6% más caro que doce meses antes. La tasa interanual se ha elevado una décima con respecto al 5,9% registrado en enero. Se trata del segundo mes consecutivo al alza, aunque se mantiene 4,8 puntos por debajo del techo del 10,8% alcanzado en julio. Más pronunciado ha sido el incremento en términos mensuales. Solo en febrero los precios subieron un 0,9%, el mayor alza mensual desde junio y la mayor subida para un mes de febrero desde 1980.
El INE atribuye el incremento de los precios al encarecimiento de la electricidad, de los paquetes turísticos y de los alimentos. El precio de la luz ha subido un 12,6% solo en el último mes. Se trata del componente que más se ha encarecido en términos mensuales, junto a los paquetes turísticos nacionales, cuyo precio se ha elevado un 13%. Aun así, el precio de la luz es un 33% más barato que hace un año. Los combustibles están teniendo un comportamiento más moderado. En febrero el precio del gasoil cayó un 4,5% y el de la gasolina apenas subió un 0,4% con respecto a los niveles de enero. En el último año, el diésel acumula una subida del 2,7%, mientras que la gasolina se ha abaratado un 3%.
Récord en los alimentos
La inflación aumenta la presión sobre la cesta de la compra. Los alimentos se han encarecido un 16,6% en el último año. Se trata de la tasa interanual más elevada de toda la serie histórica, desde en enero de 1994. El dato es más de un punto superior al 15,4% registrado en enero. Solo en febrero, el precio de los alimentos creció un 2% en términos mensuales
El gravamen de determinados productos básicos lleva reducido desde enero. El Gobierno ha rebajado del 10% al 5% el IVA del aceite y la pasta durante seis meses y ha suprimido el tipo superreducido del 4% que se aplica a alimentos de primera necesidad, como el pan o la leche. Han quedado también exentos de este impuesto hasta el 30 de junio harinas panificables, quesos, huevos, frutas, verduras, hortalizas, legumbres, patatas y cereales. Sin embargo, el IVA se mantiene intacto en otros alimentos básicos como la carne, el pescado, yogures, agua embotellada, azúcar, mantequilla, café, tomate frito y todo tipo de conservas.
El ala 'morada' del Gobierno pide tomar medidas adicionales y ha insistido en las últimas semanas en la "urgencia" de crear una cesta de la compra con precios limitados para aliviar el impacto de la inflación, una opción que los socialistas rechazan. La semana pasada la vicepresidenta primera Nadia Calviño invitó a que sean los supermercados quienes apuesten por iniciativas de este tipo, a imagen de las puestas en marcha en Francia. "Damos por supuesto que aquellos grupos multinacionales que tienen presencia en España extenderán cualquier política comercial que pueda beneficiar a los ciudadanos franceses a los españoles", afirmó en referencia a la cesta de productos básicos con precios topados que ofrecen algunos supermercados galos.
La subida de los precios de la alimentación está haciendo mella en el bolsillo de las familias. Según un estudio elaborado por Findus España, el 62% de los españoles percibe un aumento de entre el 10% y el 30% del gasto en su cesta de la compra. En concreto, el 44% afirma haber tenido que renunciar a alimentos que no son de primera necesidad en el actual contexto económico marcado por la inflación.
La previsión de inflación de la Comisión Europea para España en 2023 se sitúa en el 4,4%, todavía por encima del objetivo del 2% marcado por el Banco Central Europeo. Esta meta se encuentra suspendida temporalmente, pero Bruselas ya ha pedido a los gobiernos que ajusten sus presupuestos para volver a las reglas fiscales el año que viene.