JE JE JE...ME RIO POR NO LLORAR

ANTONIO MARCELO VACAS. 37 AÑOS DE CACIQUISMO, HAN TERMINADO, ESTO NO TIENE POSIBLE RETORNO. Fernández Vara, se presentaba a la reelección seguro de ganar las elecciones, enfrente tenía a una candidata del PP con escaso peso específico. Así, hace unos días, afirmaba que sus encuestas le otorgaban mayoría absoluta, no contaba con la tendencia general anti psoe existente en el país. Estaba seguro de ganar, pese a carecer de méritos para ello. Ya lo había logrado en 2019, y desde entonces había seguido promoviendo el mercado cautivo de votos, creando más y más, estómagos agradecidos, en detrimento del desarrollo regional.Y así, su hoja de ruta consistía, en mantenerse en el poder regional otros cuatro años vegetando, rematando su política clientelista, siguiendo llenando su propia hucha, y como ya había anunciado, en 2027, en olor de multitudes, y previo homenaje, casi a los 70 años, retirarse de la política y jubilarse.
Ya no podrá lograr su personal objetivo, a él, Extremadura le importa un pito, se va, porque es dudoso que pase cuatro años en la oposición, y se va por la puerta de servicio, humillado por la que consideraba una Don Nadie, y dejando al PSOE, que dicho sea de paso también le importa un bledo, en la peor de las situaciones políticas, y en total declive, pues el pesebre se acaba.
No sé a quien nombrará su heredero, como ya le nombró a él, Rodríguez Ibarra en 2007, porque ahora lo que cede Vara, es un partido desprestigiado y con muy poco poder, todo lo contrario de lo que sucedió en 2007, y con la segunda vuelta electoral, las elecciones generales, a la vuelta de la esquina, que será la debacle total del PSOE, y el fin, merecido, de PODEMOS.
En resumen, Fernández Vara, merecía por deméritos propios ser expulsado de la Presidencia de la Junta de Extremadura, que ha instrumentalizado, a su favor y para lograr sus objetivos personales, distanciado completamente de la ciudadanía, hasta el punto de no ver venir, que se aproximaba el fin de su vida política.
Y no solo porque la derecha junto a la extrema derecha le haya superado en votos, y sin duda pactarán, al proclamarse vencedora la noche electoral María Guardiola, así lo expresó, es que de haber podido aliarse con Podemos, porque este partido hubiera superado a VOX, difícilmente, un personaje con una ideología, posiblemente más conservadora que la que pueda tener María Guardiola, que se ha subido al carro empujada por la tendencia nacional, pactaría con una fuerza política como PODEMOS, que le exigiría contraprestaciones en forma de cargos, y quizás exigiendo un escoramiento hacia la izquierdas, a quien es un político muy de derechas.
El resultado electoral : PSOE 28 (pierde seis diputados, tenía 34), PP 28 (gana 8 escaños, partía de 20), Vox entra con 5 y Unidas mantiene sus 4. Como se preveía, Ciudadanos se queda sin sus 7 asientos y desaparece de la Asamblea de Extremadura.La participación fue del 72,17%: fue la participación final, un incremento del 2,92% con respecto a 2019. Significó 596.442 electores más. El PSOE ha obtenido el 39,82% de los votos, 232.285 en total Supone una pérdida de casi siete puntos y 55.334 papeletas, respectivamente. Los populares han logrado el 38,94% de los apoyos, 227.150 en total. Es una subida de más de 11 puntos y 58.168 votos, respectivamente. Realmente el PSOE solo le ha sacado una ventaja de 5.135papeletas.
Por su parte, Vox se ha quedado con un 8,18%, que significa 47.743 votos.Y Unidas por Extremadura ha sumado el 5,91% de los apoyos, un punto y medio menos, con 34.527 (son 9.782 menos que en 2019).
Por provincias, hay que señalar que si bien el PSOE ha conseguido más apoyos en la pacense, en la cacereña la primera fuerza ha sido el PP. De este modo, en Badajoz el PSOE ha obtenido 16 diputados (pierde 4), el PP 15 (suma 5), Vox 3 y Unidas 2 (los mismos que tenía). En Cáceres, el PP ha sumado 13 (3 más), el PSOE 12 (2 menos), Vox 2 y Unidas mantiene sus 2.
María Guardiola ha repetido hasta la saciedad que ella sería presidenta en solitario y que Vox tendría que apoyarla. Ha negado en todo momento que el partido de ultraderecha vaya a ser parte de su gobierno. Y Vox ya ha dejado claro que no le va a regalar nada.
El PP ha triunfado este 28M ganando en Badajoz, Plasencia y Montijo con mayoría absoluta y quedándose a un concejal de hacer lo mismo en Cáceres, cuyo ayuntamiento también se ha teñido de azul. Solo en Mérida y Villanueva de la Serena los socialistas han conservado la hegemonía. No ha ocurrido lo mismo en Don Benito, donde la fuerza política en contra de la fusión ha entrado de lleno en este consistorio.
Es difícil conocer que porcentaje de su victoria, se la debe el PP, a Pedro Sánchez, y que otro a Guillermo Fernández, pero indudablemente a ellos, debe agradecer en considerable medida, su éxito electoral María Guardiola. Por ello, desaparecidos aquellos, como desaparecerán a corto plazo, de la escena política, a la líder del PP no le quedará otro remedio, que esforzarse en su labor, a cuyo objeto tiene en el periodo 2011-2015, en que gobernó la región Monago y su panda, un ejemplo que no debe seguir, sino todo lo contrario, o su presidencia será tan efímera, como la del bombero.
No augura nada bueno, que, junto a Guardiola, hayan conseguido actas de diputados, por ejemplo, el propio Monago, Cristina Teniente, o Laureano León, profesionales de la política, buenos para nada. O Elena Nevado, nefasta ex alcaldesa de Cáceres, y también diputada, de la misma cuadra, pero que debe mantener una especial relación con Guardiola, porque todo el tiempo se mantuvo a su derecha la noche electoral, cuando Guardiola exultante, anunció de madrugada, “su éxito” electoral.
Todo el tiempo Nevado, hizo manifestaciones de adhesión hacia la lideresa, llegando en un momento de éxtasis, a besarle la mano, actitud servil difícilmente justificable, a no ser que Nevado, entre en el Consejo de Gobierno. Mal empezaríamos.