El día 2 de abril, Yolanda Díaz y su séquito presentan el bastón del PSOE llamado SUMAR. En estas horas, la guerra con Podemos es absoluta. Los morados quieren que se le reconozca la marca, su trayectoria y su presencia en la sociedad española, y Yolanda dice que SUMAR es de ella y Sánchez, y que si quieren que se sumen o que vayan a a las elecciones por su cuenta. Más allá del arrastre mediático de la ministra gallega, y la complicidad con el PSOE (la ministra podría ir perfectamente en las listas de Sánchez porque no hay diferencias políticas), lo que se disputa entre SUMAR y Podemos son los lugares a ocupar de cara a ser elegidos diputados/as/es. No hay más.
Los que tengan ánimo para seguir el culebrón verán que no hay desavenencias ideológicas, ambos apoyan y apoyarán al PSOE (como han hecho en la actual legislatura) a cambio de algunas prebendas, y el ideario socialdemócrata es intocable para todos ellos. El gobierno de progreso (llamado así por ellos mismo) tiene en sus hacedores intereses personales que les hace sacar los colmillos de cara a configurar listas. Son cuatro años y si pueden irán sumando.